El Consejo Superior de la Universidad Nacional de La Plata sesionó hoy por la mañana y tuvo como tema prioritario de sus distintos representantes el reclamo de recomposición salarial de los trabajadores y trabajadoras docentes y Nodocentes por parte del Gobierno nacional. También se expuso la compleja situación de las y los estudiantes para dar continuidad a las cursadas, en un contexto de ajuste económico del Gobierno nacional.
El máximo órgano de gobierno universitario aprobó por unanimidad una petición elevada por los gremios de docentes, Nodocentes y estudiantes (ADULP, ATULP y FULP) donde manifestaron su preocupación por el deterioro salarial y la crisis social.
De esta manera, el Consejo Superior se pronunció en defensa de la educación pública, la urgencia de salarios dignos para los y las trabajadoras y reafirmó la necesidad de políticas e inversión pública en materia de derechos estudiantiles.
Vale remarcar que el proceso inflacionario avanzó 40 puntos sobre los salarios de la UNLP, según precisaron los gremios, mientras el Gobierno se niega en la paritaria a acordar una recomposición. Hasta el momento, Capital Humano decidió los aumentos de manera unilateral sin aprobación sindical.
El presidente de la UNLP, Martín López Armengol encabezó la apertura de la sesión reflejando la preocupación por la “difícil crisis presupuestaria que atraviesa el sistema universitario nacional en general y en particular en nuestra Universidad, que se ve plasmado en la demora en la ejecución de obras públicas existentes, en la adquisición de equipamiento científico para nuestros centros, institutos y laboratorios, y en retrasos salariales para la planta de trabajadores docentes y nodocentes”.
También hubo un repudio generalizado por la represión contra manifestantes y posterior detención el miércoles pasado en las inmediaciones del Congreso, mientras el Senado debatía la Ley Bases. Entre los detenidos se encuentran estudiantes universitarios de las universidades UNSAM, UnaHur y UNAJ, detalló la FULP.
La declaración elevada al cuerpo por ADULP, ATULP y FULP reclamó que “de manera urgente se repare la pérdida de poder adquisitivo de los salarios, que se restablezcan y actualicen las becas estudiantiles y que el gobierno nacional entienda que el derecho a la educación está consagrado en el pacto internacional de derechos económicos y sociales que posee jerarquía constitucional y para que sea efectivo se necesita inversión para el funcionamiento, como así también inversión en salarios e inversión en políticas de derechos estudiantiles”.
El reclamo por recomposición salarial abarca a todas las universidades nacionales, que se ven afectadas por el ajuste fiscal de la administración libertaria. Luego de la marcha del 23 de abril, el Gobierno confirmó la actualización de los gastos de funcionamiento, que representan el 10% del presupuesto total. Pero aún se mantienen las demandas por aumentos salariales —que concentran el 90% del presupuesto— y mayores fondos para obras de infraestructura, programas de ciencia y tecnología y becas estudiantiles.
Justamente este último tema abarcó la intervención de la Federación Universitaria, que pidió más cantidad y mayores montos para las becas, que permitan la continuidad de los estudios. “En un contexto tan hostil y regresivo como el que estamos viviendo las prioridades tienen que estar puestas en que nadie se quede afuera; las becas tienen que estar en función de que más estudiantes puedan permanecer y avanzar”, sostuvo la FULP en un comunicado.
En esa línea, la FULP reclamó que el incremento presupuestario del 270% para gastos de funcionamiento “se traslade a un aumento para las becas y políticas estudiantiles”. Por su parte, Valentina González López, consejera superior estudiantil de Periodismo, durante su intervención sostuvo que «traemos la situación de los estudiantes para que puedan permanecer en las aulas». Y agregó: «Exigimos esclarecimiento sobre las becas de la UNLP, su criterio de selección y aplicación de las mismas a cargo de Bienestar Estudiantil».
