Por Héctor Bernardo
Este domingo 2 de junio, más de 98 millones de mexicanos y mexicanas están convocados a las urnas para elegir presidente, nueve gobernadores y renovar 500 escaños la Cámara de Diputados y 128 en la Cámara de Senadores.
Los candidatos para la presidencia son tres: Claudia Sheinbaum, del oficialista partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena); Xóchitl Gálvez, del partido Fuerza y Corazón por México, una alianza conformada por el Partido Acción Nacional (PAN), Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Partido de la Revolución Democrática (PRD); y Jorge Álvarez Máynez, del Movimiento Ciudadano.
Sin bien Jorge Álvarez Máynez ha logrado una gran llegada al electorado juvenil, con propuestas como la despenalización del consumo de marihuana y el derecho al aborto, las encuestas aseguran que quien conducirá los destinos de México por los próximos seis años será una mujer.
La elección parece polarizada entre Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez, aunque, si las consultoras no se equivocan, no se tratará de una competencia reñida, ya que la mayoría da una diferencia de alrededor de 20 puntos a favor de la candidata de Morena.
¿Quién es Claudia Sheinbaum?
La candidata de Morena, favorita para ganar las elecciones presidenciales, representa la continuidad del proyecto iniciado en 2018 por el actual mandatario, Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
De ser elegida, se transformaría en la primera mujer presidenta en la historia de México. En su recorrido político, Sheinbaum ya ha marcado un hito en 2018, al ser la primera mujer elegida como jefa de gobierno de la Ciudad de México.
De formación física y doctora en ingeniera, destacada por sus investigaciones en el campo académico, en el 2007 fue galardonada con el Premio Nobel de la Paz por su trabajo en el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático, de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El Congreso: la gran batalla
Además de elegir a quien gobierne el país durante el período 2024-2030, los mexicanos y las mexicanas deberán votar alcaldes, juntas municipales, miembros de los congresos locales y a quienes estén al frente de nueve gobernaciones: Chiapas, Ciudad de México, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla y Yucatán. En total, están en juego más de 20 mil cargos en todo el país.
Los analistas destacan que la gran batalla se dará en la elección de los cargos para el Congreso Nacional, en donde hay 500 escaños la Cámara de Diputados y 128 en la Cámara de Senadores.
El resultado en las legislativas definirá si el proyecto de Morena podrá hacer las profundas reformas que plantea o no. Entre ellas, la modificación de la estructura del Poder Judicial, estamento que, como en el resto de América Latina, se ha transformado en uno los grandes rivales del proyecto popular.
El crimen político empañó la campaña
La violencia política se ha transformado en un factor recurrente en las elecciones mexicanas. Los grupos del crimen organizado, algunos de ellos enquistados desde hace décadas en las Fuerzas Armadas y de seguridad, son un factor determinante en este proceso.
Durante las elecciones de 2018 se registraron 24 asesinatos políticos y, para estas elecciones, al menos 31 candidatos y candidatas a diversos cargos han sido asesinados.
Chiapas, Michoacán, Estado de México, Guerrero, Veracruz y Morelos fueron registrados como los estados con mayor violencia política contra candidatos y candidatas. A ellos se suma una innumerable cantidad de amenazas.
A pesar de ello, nada impedirá que este domingo 2 de junio los y las mexicanas vayan a las urnas y decidan con libertad cuál será su destino.
