Por Ramiro García Morete
«En una casa fría nos hemos encontrado / hablemos un rato de esas cosas que son livianas / ¿qué tal tus cosas? ¿lograste aquello, te divertís?». La casa –o el departamento– estaba vacío. Recientemente había pasado la Navidad en su Bragado natal y su compañera e hija estaban de vacaciones. La idea era «disfrutar un poco la soledad», «agarrar la guitarra y cantar, cantar y cantar largas horas, con vinito de por medio… Exorcizar un poco algunas penitas que venía arrastrando y convertirlas en canción». Buscando el rasgueo típico de Leo García surgiría «Casa fría». En seis días tendría cuatro canciones. Simples, dirá. «Tal vez ese sea mi mayor defecto. Quedarme con los primeros acordes y con la forma que va surgiendo en la impro». Pero en esa espontaneidad y combinación beats con cuerdas de nylon, de amor por el sonido con calidez lo-fi, Joaquín Rodríguez o Elmuditoantisocial crea gran universo doméstico. Y de allí surge un nuevo material: Conversaciones. Para presentarlo, hacemos honor a ello y entablamos una sencilla conversación con el músico.
«No tengo nada que contar y tal vez mejor así». Hay algo de ligereza bien entendida, de celebrar la canción por sí misma sin ambición de ser siempre trascendentales, ¿no?
Temprano escribí esto en un cuadernito: «Sentirme vivo es crear todos los días un universo nuevo en mi cabeza, de fantasías palpables, de colores vivos que desborden los contornos y maquillen mis dolores de formas más llevaderas». Eso para mí es hacer canciones. Eso podría ser no tener nada que contar. Tal vez la mejor manera de decir algo es no tener ninguna pretensión. Dejarse llevar por el momento. También es un recurso compositivo que vengo trabajando ya hace un tiempo y de manera notoria en todas mis composiciones. «Yo tiro rimas que no riman. Soy así, feliz sin modos», remata el estribillo. Podría ser una linda manera de acomodarse en estos días. Vivir con lo que más feliz nos haga y sin estructuras, sin modos
Esa idea se traslada al sonido, bastante espontáneo y cálido. Están tus dos vertientes, pareciera: la criolla y los beats.
Es un recurso compositivo que me queda cómodo. Me resulta tedioso sentarme a terminar una letra o melodía. Es válido dentro de lo que yo busco trasmitir: espontaneidad, inocencia en las palabras. No soy rebuscado, para nada, claramente, en la busca de la rima o la palabra justa. Solo agarro la guitarra. Cierro los ojos e improviso. El resto es encontrar el hilo conductor. Hay un sentimiento que va a predominar y es el de nostalgia. Alegría o quién sabe qué sentimiento este fatigándote el camino. El beat siempre está como excusa. Es algo que constantemente vengo trabajando y que ya se ha convertido en rutina dentro de mis días. Es la excusa perfecta para sentirme acompañado y soltar la improvisación.
Atahualpa decía que a la guitarra se le hace preguntas y ella responde. ¿Hay algo de eso?
Sí. La guitarra es mi compañera. Me escucha sin interrupciones y me devuelve en sonidos sus caricias. Tal vez no esté a la altura de sus caricias. Quisiera ser más prolijo y metafórico en mis rimas. Pero como decía, también es válido dentro del estilo que busco trasmitir. En este caso fue como una conversación con la canción y yo mismo. Pareciera que ese otro al que se le habla soy yo en el espejo. Es una reflexión de mis pasos transcurridos hasta hoy, buscando algo que nunca se encuentra y preguntándome si está bien, si seguimos buscando o abandonamos. ¿Qué hacemos, mudito? ¿Seguimos cantando? ¿Te divertís? La guitarra a veces, si no siempre, es mi cuaderno de anotaciones. Es mi diván.
¿Qué planes tenés a futuro próximo?
En 2021 varias fechas se cancelaron y no tuve más ganas de renegar buscando lugar, etc. El 2022 me tiene agarrado con ansias de volver a tocar. No logro convivir con la composición y la puesta en escena. Me siento muy cómodo componiendo y haciendo la mezcla de mis canciones. Pero el objetivo inmediato sería encontrar lugares donde exponer mi arte y disfrutar de toda esa puesta en escena y etc. La lucha es constante. Siempre me gana el compositor en su burbujita y comodidad del hogar. Veremos en qué terminamos. Hoy estoy preparando canciones para una amiga que amo como canta. Es otra de mis apuestas.