Se cumplen quince años de la segunda desaparición forzada de Jorge Julio López, militante y testigo en los juicios por crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura cívico-militar y emblema de la lucha por Memoria, Verdad y Justicia. Con actos y movilizaciones tanto en La Plata como en CABA y otros puntos, se volverá a rendir homenaje y decir «presente» en su nombre.
Vigilias, movilizaciones, intervenciones y actos serán parte de la agenda de actividades pautadas para el sábado 18, tanto en la capital bonaerense como en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Desde la vigilia sonora transmitida por radio Futura de La Plata desde las 22 horas del viernes, el sábado continuará con la concentración al mediodía en el sitio de memoria de la ex Comisaría 5ta de La Plata.
Luego habrá acto en los tribunales de 8 y 51, mientras que por la tarde también se presentará un mural en la ciudad de Berisso. En tanto, el sábado desde las 18 horas se realizará la ya reconocida marcha que parte de Plaza Moreno, convocada por la multisectorial de organizaciones de derechos humanos de la región.
Desaparecido por segunda y última vez en septiembre de 2006, López fue testigo clave en el juicio que llevó a la cárcel al represor Miguel Osvaldo Etchecolatz, funcionario de la última dictadura cívico-militar argentina que cumplió tareas como director de Investigaciones de la Policía bonaerense y fue mano derecha del general de brigada Ramón Camps.
El 18 de septiembre de ese año, López debía presentarse para presenciar los alegatos en el Tribunal Oral Federal N° 1 de La Plata, en el marco del proceso a Etchecolatz, pero nunca apareció y, a partir de allí, nunca más volvió a ser visto. Desde ese momento, el nombre de Jorge Julio López se convirtió en un símbolo de lucha en el reclamo por Memoria, Verdad y Justicia.
«A quince años, la causa de mi viejo tiene cincuenta cuerpos y ninguna pista firme», fueron las palabras de su hijo, Rubén López, en diálogo con Télam en el marco del cumplimiento de un nuevo aniversario. Este viernes empezaron las actividades en el Centro Cultural Kirchner con la muestra Reliquias, de Jorge Caterbetti, que muestra la ropa que había preparado López para llevar a la audiencia por los alegatos y una réplica de la silla en la que se sentó a declarar el 28 de junio de 2006.
«Ya la noche anterior había dejado la ropa lista que iba a ponerse, había acordado quién lo iba a pasar a buscar, pero cuando mi primo llegó a la casa ya no estaba. Al igual que mi hermano, creyó que se había ido antes, solo, así que se fueron a la Municipalidad pensando que lo encontrarían ahí, pero no estaba. Nunca supimos qué pasó», recordó López respecto de las horas previas a que su padre fuera visto por última vez.
«Las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, que hace 45 años están luchando por saber qué pasó con sus nietos, recuperando nietos y exigiendo Memoria, Verdad y Justicia. En ese mismo rango tratamos de seguir eso. Tenemos la ilusión de que lo encontremos en algún momento. Nos mantenemos abiertos a seguir la lucha. Lógicamente, por cuestiones de edad, uno entiende que seguramente con vida no está y lo mínimo es encontrarlo», expresó López en diálogo con El Destape.