En el Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres y a casi seis meses de la sanción de la ley de interrupción voluntaria del embarazo (IVE), el Ministerio de Salud presentó el protocolo para su aplicación destinado a equipos y establecimientos sanitarios. En el acto se resaltó la importancia de la lucha de los feminismos para alcanzar la normativa.
Este viernes, en el Boletín Oficial fue publicado el «Protocolo para la Atención Integral de las Personas con Derecho a la Interrupción Voluntaria y Legal del Embarazo», el cual sigue los lineamientos de la Ley 27.610 de Acceso a la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) sancionada en diciembre de 2020, así como también los de la Interrupción Legal del Embarazo (ILE), contemplada en Argentina desde 1921.
«Es una enorme conquista, producto de la lucha de muchos años y de muchas personas», destacó la secretaria de Legal y Técnica de la Presidencia, Vilma Ibarra, una de las autoras del proyecto enviado por el Ejecutivo que se convirtió en ley.
Por su parte, la ministra de Salud, Carla Vizzotti, puso el acento en que el protocolo que comenzó a regir hoy constituye «una herramienta para ampliar derechos».
La ministra participó del acto junto con la asesora presidencial Cecilia Nicolini desde Cuba, donde se encuentran a fin de avanzar con los diálogos para adquirir las vacunas que produce la isla. Desde allí destacaron «el enorme esfuerzo de los equipos técnicos involucrados en el diseño del reglamento que busca garantizar el pleno acceso de las mujeres y otras personas gestantes a los derechos sexuales y reproductivos».
La directora de Salud Sexual y Reproductiva, Valeria Isla, brindó detalles del protocolo presentado y explicó que establece pautas con «precisiones legales y estandariza prácticas basadas en recomendaciones, construidas sobre las mejores evidencias científicas disponibles para abordar situaciones singulares, únicas».
La funcionaria nacional explicó que el protocolo «permite respaldar, legitimar, apoyar y acompañar el trabajo de los equipos de salud que ya realizan las prácticas en el territorio, indicar intervenciones basadas en la mejor evidencia científica actualizada, en las experiencias previas de implementación de versiones anteriores de protocolos nacionales y provinciales y en las buenas prácticas llevadas adelante por los servicios de ILE».
El protocolo contempla un marco legal, donde se tienen en cuenta los lineamientos contemplados en la ley, como el consentimiento informado y la responsabilidad del profesional de la salud, así como también el proceso de atención integral tanto con misoprostol como AMEU y de manera instrumental.
