Desde hace semanas, el diálogo entre los sectores que componen la alianza que llevó a Alberto Fernández al poder en 2019 está cortado, aunque no por eso se detuvo el ida y vuelta, fundamentalmente entre la Casa Rosada y los legisladores cercanos a la vicepresidenta de la nación, Cristina Fernández de Kirchner.
A las declaraciones cruzadas entre uno y otro sector, que cada vez se producen con más contundencia, se sumó desde hace algunos días un nuevo esquema de funcionamiento donde la forma de contrarrestar lo pautado por la conducción económica del Gobierno nacional, fuertemente cuestionada por Cristina el viernes pasado desde Chaco, se produce en el Congreso, con distintas iniciativas tendientes a mejorar los ingresos de los sectores más castigados por la crisis.
En este sentido, el martes se presentará una iniciativa de los legisladores del espacio referenciado en el dirigente social Juan Grabois para la creación de un salario básico universal destinado a trabajadores informales, desocupados y de bajos ingresos. Si bien la autoría del proyecto es de los legisladores Itaí Hagman, Natalia Zaracho y Federico Fagioli (Frente Patria Grande), también lleva la firma de diputadas y diputados del kirchnerismo, como Hugo Yasky, Mónica Macha, José Pablo Carro, entre otros.
La «prestación monetaria mensual no contributiva y de alcance nacional destinada a trabajadores y trabajadoras de bajos ingresos», como la caracterizaron en el proyecto, está destinada a «personas que se encuentren desocupadas; se desempeñen en la economía informal; se encuentren inscriptas en la categoría ‘A’ del Régimen Simplificado de Pequeños Contribuyentes o se encuentren inscriptas en el Régimen de Inclusión Social y Promoción del Trabajo Independiente».
«Hay millones de personas que trabajan sin tener un empleo formal, que no tienen garantizadas las condiciones más básicas de vida. Este fenómeno no pasa solo en Argentina, es mundial, y es consecuencia de las transformaciones en el mundo del trabajo y de la creciente concentración de la riqueza», afirmó Hagman.
Chispazos entre el Congreso y la Casa Rosada al interior del Frente de Todos
En las últimas semanas, con la intensificación de la interna, la política fiscal del Gobierno es foco de fuertes críticas dentro del Frente de Todos, con dos personajes centrales de referencia para esos cuestionamientos: Martín Guzmán y Matías Kulfas, ministros de Economía y de Desarrollo Productivo, respectivamente, y hombres de confianza del presidente Alberto Fernández en materia económica.
Aunque no directamente, ambos fueron mencionados en el discurso de la vicepresidenta Cristina Fernández el viernes durante la ceremonia en la Universidad Nacional del Chaco Austral, donde fue distinguida con el doctorado honoris causa.
En ese marco, con el proyecto de salario básico universal se presentaron tres proyectos en el Congreso que van en línea con la estrategia de contrarrestar la política fiscal de Martín Guzmán.
La semana pasada, con la firma del diputado y referente de La Cámpora, Máximo Kirchner, un grupo de legisladores vinculados al sindicalismo, propuso adelantar al 1º de julio los aumentos pautados para el salario mínimo vital y móvil. La negociación había fijado en marzo pasado un aumento del 45 % dividido en tramos que se completarían en diciembre.
Pocos días después, un grupo de senadores cercanos a la vicepresidenta impulsó una iniciativa para realizar una nueva moratoria previsional que le permita a unas 500.000 personas acceder este año y el próximo a su jubilación, a pesar de no tener completos los aportes.
El proyecto establece un plan de pagos para las personas que este año y el próximo alcancen la edad jubilatoria (65 años los hombres y 60 las mujeres) y que no cuenten con los treinta años de aportes a la seguridad social correspondientes para acceder al beneficio. La iniciativa permite la regularización de deudas previsionales hasta diciembre de 2008, inclusive.
«Si el debate lleva a la Argentina a construir un sentido común que le permita salir de lo que por tanto tiempo hemos vivido de mucha inestabilidad del rumbo y nos pone en un lugar de mayor firmeza para seguir un rumbo estable, es bienvenido», dijo este lunes en declaraciones radiales el ministro de Economía, en respuesta a las críticas de los últimos días.
