En lo que va de 2017, al menos 12 periodistas han sido asesinados en México. Durante el gobierno de Peña Nieto, han sido 45. Si se toman en cuenta las últimas dos décadas, el número llega a 129. A estos números se suma otra triste cifra: 23 periodistas desaparecidos.
En Argentina, el gobierno de Mauricio Macri tiene como una de sus características la persecución, la censura y el despido a los trabajadores de la prensa. Cada día son menos las voces críticas que tienen espacio en los medios de difusión masiva y los medios alternativos reciben cada vez más presión y asfixia económica.
Para analizar estos fenómenos, que no sé dan solo en México y en Argentina, en un encuentro realizado en la Facultad de Periodismo y Comunicación de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) disertaron la periodista, investigadora y corresponsal en argentina del diario mexicano La Jornada, Stella Calloni y el filósofo de origen mexicano especialista en estudios de comunicación, Fernando Buen Abad.
El encuentro se llevó a cabo en la sede Presidente Néstor Kirchner de la unidad académica, en el marco de la Cátedra Práctica Integradora III de la Tecnicatura de Comunicación Popular, con la coordinación del periodista y profesor Sebastián Salgado y la presencia de la coordinadora y docente de la Tecnicatura, Claudia Villamayor.
Al comenzar, Buen Abad aseguró que “existe una arremetida contra la libertad de expresión de los pueblos” y agregó que “eso que lo que vemos hoy en México, es el futuro de Argentina”.
Buen Abad lanzó la pregunta sobre “¿quiénes son los asesinos de todos esos periodistas?”, refiriéndose a los 12 comunicadores mexicanos asesinados este año. Luego respondió: “hay por lo menos tres fuentes de esos crímenes: una es el Gobierno Nacional encabezado por Peña Nieto, el principal responsable; la segunda fuente son los gobernadores de los Estados; y la tercera es el crimen organizado”.
“Es necesario remarcar que el crimen organizado tiene toda una industria que incluye el tráfico de drogas, pero también el tráfico de armas, de personas y de órganos. En ese clima macabro se desarrolla la actividad de los periodistas”, remarcó.
Por su parte, Calloni señaló que “en la historia de la humanidad, nunca hubo una censura global tan contundente”.
“Hoy en día, el poder imperial, el poder hegemónico, maneja el 95% de la información que circula en el mundo”, subrayó.
Calloni sostuvo que “en Argentina, hay, al menos, tres mil periodistas que han sido despedidos por cuestiones ideológicas. Estamos viviendo una cesura a manu militari”.
“Cuando llega al poder un gobierno que responde a los intereses de Washington, a los intereses de las fundaciones y ONGs que responden a la Embajada norteamericana, la censura es uno de los precios que los pueblos tienen que pagar”.
Por último, Calloni y Buen Abad llamaron a resistir este ataque contra la libertad de expresión, a construir un nuevo informe Mac Bride que analice la concentración mediática, económica y militar y a usar toda la creatividad para enfrentar a estos poderes.