Este martes, los trabajadores judiciales fueron brutalmente reprimidos por la Policía Federal, luego de una protesta por mejoras salariales en el Palacio de Tribunales, en pleno microcentro porteño. Los efectivos, dependientes del Ministerio de Seguridad de Patricia Bullrich, con golpes, gas lacrimógeno y detenciones buscaron neutralizar una protesta que hasta entonces era totalmente pacifica.
La Unión de Empleados de la Justicia de la Nación (UEJN), encabezada por Julio Piumato, mantiene desde hace meses un reclamo por una recomposición salarial para los meses de julio y agosto que logre superar la inflación, al tiempo que rechazan -incluso vía judicial- el impuesto a las ganancias. Es en este marco que este martes decidieron realizaron un «banderazo nacional» en las diferentes dependencias en el país.
Piumato aclaró que no era una marcha, sino que una vez finalizado el banderazo dentro del Palacio salieron pacíficamente para desconcentrarse, «tomando por 5 o 10 minutos» la calle, mientras se iban dispersando para marcharse. Allí es cuando intervino la Policía Federal. «Empezaron a empujar provocativamente», describió.
El dirigente sindical explicó que se acercó a pedirles a los efectivos que se calmasen, que ya se retiraban. «Cuando planteo eso me tiran gas pimienta y ahí empezaron a reprimir a mansalva a todo el mundo», explicó Piumato.
El plan de lucha de los empleados de Justicia de esta semana, además del banderazo, incluye un paro previsto para el viernes.
Según detalló Piumato en una reciente entrevista en Canal E, desde diciembre a la fecha, los judiciales tuvieron «una pérdida salarial muy importante que supera el 28 %».
En esa misma línea, el referente sindical destacó que el problema también radica en la cuestión presupuestaria. «Estamos en una emergencia judicial, hace falta un plan estratégico que otorgue más herramientas», sostuvo.
Asimismo, aseguró que los edificios judiciales no cumplen con las condiciones básicas de salubridad. «La Justicia tiene autarquía financiera, pero eso no alcanza porque los coeficientes están atrasados», concluyó.