Por Leandro Gianello
Mañana se cumplen 40 años del golpe de Estado que abrió las puertas a la dictadura más sangrienta conocida por los argentinos. Mientras la memoria y la reflexión se hace carne en aquellos que la padecieron, otros, hijos de ese rigor, herederos o simples informados, participan de la historia de lucha que se reivindicó en los últimos años.
Son miles de lugares en los que se ejerce la memoria o se cristaliza el pasado, y pueden ser tanto espirituales como físicos. Uno de éstos es el predio del ex Batallón de Infantería de Marina en Ensenada, el BIM 3, que luego de varios años de abandono transmutó en espacio académico universitario para las carreras humanísticas.
En este marco se pensó el ciclo “No Nos Han Vencido”, una serie de intervenciones colectivas llevadas a cabo por artistas, productores culturales, militantes, organizaciones e instituciones diversas del campo nacional y popular, “personas y organizaciones que creemos en los derechos humanos, los practicamos, luchamos por ellos y los construimos cotidianamente”, indican los organizadores responsables.
“En 1976, con un golpe de estado cívico-militar, se intentó sistemáticamente acallar las voces de cientos de miles de compatriotas que, desde su lugar en mundo, luchaban colectivamente por una patria con justicia social, independencia económica y soberanía política”, expresaron los referentes de la actividad que comenzó el sábado pasado y culminó ayer con una serie de relatos de la memoria colectiva de los últimos 40 años sobre los autoritarismos y las luchas del pueblo.
Federico Araneta, miembro de la organización colectiva, dijo a Contexto que las actividades desarrolladas en en diferentes puntos de la ciudad y en las cuales los vecinos pudieron formar parte de ellas, junto a intervenciones “multilenguaje” como la presentada ayer en el auditorio de la Facultad de Psicología de la UNLP, “busca reflexionar sobre los procesos sociales vividos en Argentina no sólo durante la dictadura, sino hasta el momento actual”.
Exhibimos “un recorrido histórico que pone en tensión la idea del mundo todos o para unos pocos”, explica Araneta, por eso mismo se ideó la construcción del relato de los 40 años del golpe a través de videos, danza, obras de teatro, serigrafías, estampados, intervención directa y publicaciones, como el libro “Pájaros Rojos” con poemas de Graciela Pernas Martino o la Carta a la Junta Militar de Rodolfo Walsh.
La propuesta, “que se viene trabajando desde el año pasado con otras organizaciones es reivindicar el espacio urbano”, como se hizo el lunes pasado en cuarenta esquinas de la ciudad, en las cuales músicos, militantes o simples vecinos se juntaron a cantar “por la justicia, esa que impulsamos y generamos cuando estamos juntos, fortaleciendo lazos, diciendo lo que somos y lo que queremos”, de todas las maneras posibles, indicó Araneta.
Ayer, un auditorio de la Facultad de Psicología con gran asistencia aplaudió a raudales la presentación de las obras “La gran murga”, -un recorrido por el relato histórico en clave musical rioplatense-, y la adaptación de “Bla, bla, bla”, obra teatral ideada por H.I.J.O.S. pero esta vez representada por los propios nietos de los desaparecidos.
El ciclo se completó con un número de danza contemporánea y la proyección de dos videos; uno sobre la carta abierta de Rodolfo Wlash y otro sobre la teoría de los dos demonios, cerrando con el mismo canto que se pudo escuchar en las cuarenta esquinas durante la semana.
A su vez, el colectivo de artistas, integrado por músicos, escritores, escultores, pintores y actores, entre otros, destacó mediante un comunicado divulgado las últimas horas, que luego de 40 años, la lucha continúa a pesar de las “veces en nuestra historia que los poderosos intentaron doblegar las voluntades del pueblo”.
Las cicatrices provocadas por la dictadura con “la más cruenta violencia y con el mayor desprecio a la vida”, son marcas dejadas por el secuestro, la tortura y la muerte impune de 30 mil compañeros con las que “intentaron silenciar a un proyecto de país para los humildes de la patria”, pero a pesar de todo esto, “resistimos”.
“Por cada compañero una madre se levantó gigante en la historia, por cada desaparecido nació un hijo de su lucha, por cada exiliado un compatriota con un profundo amor a la patria, con cada preso una persona libre”, puntualizaron desde el colectivo de artistas.
“Ante viento y marea, cuando era imposible soñar porque la oscuridad de la historia nos enceguecía, luchamos, inventamos modos, arriesgamos, dejamos cama y sillón para ponerle el cuerpo, el corazón, la cabeza y el alma a este camino”. Las madres y las abuelas, los sobrevivientes, los hijos y los nietos, los hermanos, los militantes del campo nacional y popular, “aquí estamos de pie, en lucha, como siempre, No Nos Han Vencido”, concluyeron.
La semana intervenida
El ciclo de actividades para conmemorar los 40 años del golpe que cerró ayer en el simbólico predio del Ex BIM 3, arrancó el sábado 19 de Marzo pasado con una Impresión colectiva de imágenes en Parque Saavedra con el fin de “hacer memoria y multiplicar con técnicas de grabado imágenes para pensar y conversar”.
El domingo 20 se presentó “Verdad”, una intervención espontánea en la ciudad, mientras que el 21 tuvo lugar la propuesta de “40 esquinas + 40 grupos” cantando en toda la ciudad, que convocó “a los vecinos a encontrarse, escucharse y expresarse”.